martes, 9 de julio de 2013

Contrariedades

Días como hoy me sitúo en una encrucijada, en un choque de contrariedades.
Estoy feliz y triste a la vez, me encuentro perdido y puede que en verdad me haya encontrado.
La señal que buscaba puede que sea etérea y precisamente sea una no señal, captando que cuando no ocurre nada, es porque todo va mal
Me empeño en escribir en la arena y el agua lo desempaña, repitiendo y volviéndose a esfumar, igual que todos los actos que realizas se borran de la memoria
Hace calor, sin embargo tengo frío, luce un radiante sol y sin embargo llueve en mi interior
Intento tararear el estribillo de esa dichosa canción, pero cambian las palabras
Creo estar seguro de actuar bien, sin embargo todo sale mal, ningún afluente desemboca en el mar, se secan a medio viaje
Mi corazón se enamora de este lugar, pero mi mente le da calabzas, ordenándole partir, intentando que comprenda que lo mejor le espera lejos
Sensación de que marcho a pasos agigantados, es un error, pues apenas avanzo
Mi firmeza y entereza son sorprendidas por la duda, por la desconfianza, esta jodida experiencia me abruma
A ratos sonrío, otros me metería dentro de un baúl para ser un miserable recuerdo lejano
A pedacitos lucho, pero a kilómetros me rindo, no más sufrir, no puedo más, mi alma abandona mi cuerpo, mi corazón late únicamente para bombear sangre, pero no siente
Estoy en un cruce, paralizado, rompiéndome a mí mismo, azotándome con aquello que me perturba, soy imbécil, un idiota avispado de ilusiones, creyendo que el mundo que anhelo existe... Hoy vivo contrariado, en un rompecabezas en el que ninguna pieza encaja, no están fabricadas a medida de los huecos, tampoco quiero adaptarme pues no quiero cambiar
Camino descalzo, me duele hasta la paciencia, tengo miedo de fallar en el intento, pánico a decir adiós, en esta vida tintada del color no real
Voy a saltar, en esta calzada sin pavimento, con  orgura pedregosa, en la que el tiempo se para y huye de mí.
No hay andenes, solo curvas y muros que obstaculizan lo que quiero ver, impaciencia, relojes de arena infinitos... Me atropella la araña que me atrapa en su red
Ya no quiero caminar, solo me deslizo, atragantándome de casualidades y mísero destino
La vida me lleva la contraria, océano de indecisiones, mejor no ver cómo gira el mundo,
pegarme la vuelta, fugarme del planeta, saltar del edificio, no ver ni un amanecer más, no dar más de mí, ser un poco egoísta, pactar con el diablo, romper las reglas y edificar en lo prohibido
Resetear mi mente cuando esté saturada, retar al olvido, almacenar recuerdos en urnas de cristal y esparcirlos al vacío, incinerándose en la atmósfera....
Polvo somos pero en ceniza me convertiré, ahora tengo ganas, después tiro la toalla, no sé..
Quiero seguir escribiéndo, desahogándome con un puto folio que no entiende de sentimientos, pero la tinta se corre, pongo una A y se vuelve O
Imcomprendido, disuelto en un lago vacío, me golpean las palabras... PARA YA!
Abandono el boli y el papel, quede como quede este incomprensible texto...


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