Recorriendo la Madrugada

A tientas recorro la madrugada,
por su obtusa intercidumbre,
repleta de cargos de conciencia,
inclusives almohadas cargadas de pesares

Triste melodía silenciosa,
discurre tras el devenir de las horas
Pasajera carabina poderosa te destroza,
aunque su belleza calmada te enamora

Retumban en tu tímpano los hechos del día,
los estudias haciendo balance, fluye mejoría
Acampas recóndito sobre un sábana sedosa, fría,
evitando la luz de una luna llena vigía

Dibujando con tu mirada, planificando el mañana,
lo ves todo tán fácil, tan claro,
pero al alborear se emborrona,
desaparecen las notas perceptivas por el piano

Plantas los pies en un suelo plagado de espinas,
avanzas cabizbajo, somnoliento a través del pasillo.
Pegas un trago de agua congelada que te quema,
aviva tu llama rezagada tras el cristal que creía ser espejo

Desempañas la verdad negada por tu tocudez
Pulsas el interruptor de la luz, para despertar tu reflejo
Empapas tu rostro con gotas de agua impura,
aclaras tus ideas, vuelves al lado derecho de la cama

Si mantienes a flote tus pensamientos,
no pegarás ojo entre el tic tac voluminoso del despertador.
La estúpida madrugada desplaza tu resignación,
sin moverte del lugar, duermes, puta prisión...