Escapémonos

- Cielo, mi madre se opone a nuestra relación, me recrimina que yo merezco alguien mejor que tú, que no tienes nada que ofrecerme

+ ¿Y tú que le dices?

- Que yo a quien quiero es a tí; Que no siempre lo que cuenta es una  perfecta carrera universitaria, ni vestirse elegante, tampoco la fama.
Lo que realmente me importa es cómo eres conmigo; Los pantalones anchos y sudaderas enormes restan importancia.

+ Gracias cariño. En este siglo hay gente que aún no abre los ojos y se da cuenta de que quienes arruinan nuestra existencia son personas con traje, corbata y zapatos de charol; No personas humildes con melena larga, barba y ropa ancha. Putas apariencias
¿Y qué vas a hacer?

- Pues seguir contigo aunque me cueste pelearme con mi familia, mis sentimientos están por encima de todo, de todos

+ Tengo una idea: ¡Escapémonos!

- ¡Estás loco! ¿Y dónde iremos? ¿De qué viviremos?

+ Sí que estoy loco, pero por tus huesos. Podemos ir a las estrellas, donde los luceros del alba nos iluminen en nuestro camino amoroso. Vivir de polizontes en el bote salvavidas de cualquier barco, escondidos hasta el amanecer, cuando nos descubra in fragantis el sol
Somos capaces de construir una casita de madera, más allá del bosque, en la profundidad de la espesura, donde hagamos el amor en una amaca compuesta de raíces de plantas.
Arriesgarnos a escondernos en la cima de una enorme montaña nevada, donde el único calor que encontraramos naciera del roce de nuestros cuerpos
O si lo prefieres nuestro nido de amor puede ser en la arena del mar, montando una pequeña tiendecita de campaña, iluminada por linternas durante la noche, por tus ojos durante el día
O donde tu quieras... ¿No te atreves? ¿tienes miedo?
Podemos vivir de lo que la naturaleza nos ofrezca, podemos hacerlo, libres, tú y yo

- ¿Miedo? Ese vocablo está tachado en mi diccionario; Contigo me siento a salvo, en casa, no necesito nada más

+ ¿A qué esperamos? No hace falta equipaje, empecemos nuestra historia de cero, inventemos nuestro principio, descubramos el final. Por una vida contigo
Esta historia la empezamos como muchas otras acaban: Siendo felices y comiendo perdices

- ¡ Está bien! ¡Dame la mano! ¡Corramos!

+ ¡Corramos pues! ¿Lo sientes?

- ¿Qué debo sentir?

+ El olor de un mundo creado a nuestra imagen y semejanza, traspasando esta verde vereda

- Sí, puedo percibirlo... Te Quiero Cielo

+ Te quiero Vida