Algo inusual desencadenó el universo, para que un
instante, fuese perfecto; Sin peros ni defectos. Extraordinario y mágico son
las palabras adecuadas, un alineamiento de miradas, refeljando un beso que ya
se demoraba. Poco importaba el reloj o el frío, pues nuestro alrededor se
detuvo. Todo cambió; Nuestro hilo invisible, encargadao de unirnos, se
estrechó.
He ahí el amor… Ayer apenas éramos nada… Hoy lo somos
todo
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