Por tu ventana me dejó caer a la medianoche, cuando duermes, y apostado en el marco te observó quieta, te cuido, para que estés bien y nada ni nadie interrumpa tus dulces sueños
Por tu ventana me cuelo cada noche, observo el caer de tu melena por la almohada, tu piel suave como la seda, te acaricio, te susurro al oído miles de cosas bellas, pero ninguna más que tú
Por tu ventana veo pasar las estaciones, el frío, el calor, la lluvia, la alineación de los planetas, la luz de los aviones nocturnos... Veo los rayos de la luna irrumpiendo en la penumbra de tu oscura habitación, pero tú de por sí la iluminas, pues brillas con luz propia
Por tu ventana revelé lo que es una auténtica princesa, sin poseer castillo, ni corona ni un bonito vestido, pero sí un corazón que late al ritmo del sentir, vestida con un tierno pijama de ositos
Por tu ventana dejo escapar mis tristes pensamientos, lo borroso, dando paso a las cosas lindas, que sólo tu eres capaz de hacer que nazcan en mí
Por tu ventana me perdería cada crepúsculo de mi vida, es como si entrase en un portal a otro mundo, donde al cruzarlo no existe nada más, excepto tu hermoso rostro descansando en paz
Por tu ventana es cuando las noches son realmente perfectas... Cuando me regozijo junto a tí y te abrazo, a lo que sonríes risueña, como un acto reflejo.
Por tu ventana me empecé a dar cuenta de que te quiero, originándose lo que sin duda es el paisaje y el lugar más especial que existe en el mundo
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