martes, 26 de abril de 2016

Bailemos



Baila conmigo amor. Bailemos como si fuese la última vez, pero con la ilusión intacta de la primera. Bailemos con la música inmejorable que emiten nuestros corazones al latir, bajo la luna menguante de principios de julio.
Agarrémonos de nuestras arrugadas manos,  coloca la otra sobre el peso que ha podido cargar mi hombro, yo lo haré rodeando la cintura que tantas veces he amado.
Pasitos lentos, acordes a nuestros límites, pero no menos emocionantes…
Millones de estrellas se extinguen, pero jamás será nuestro brillo interior el que se borre, ni se marchite como una flor que solo ama la primavera.
Mirémonos la mirada, veamos reflejada nuestra vida en el espejo que nos proporciona el alma gemela con la que danzamos, riéndonos del tiempo, dedicándonos sonrisas cómplices, regalándonos amor hasta en los días más fríos, en los que nuestro invierno está más cercano. Pero de momento, bailemos…aún nos restan aires de primavera con sabor a verano, mientras el tiempo nos de tregua.


Polvo de Estrellas



Una sensación realmente placentera me despertó al amanecer; Mis ojos estaban cegados por una venda de terciopelo, ligeramente apretada, que al intentar desprenderme de ella, apartaste mis manos hacia tus calientes senos, fulgurantes y explosivos para mi amante tacto.
Tu cuerpo yacía sobre el mío, con tus manos deslizándose sobre mi pecho tembloroso, y tu sexo apretándose intensamente sobre el mío, coordinados en un movimiento a su libre albedrío.
La humedad inconfundible de tus labios jugaba a corretear por los bordes ya excitados de mi cuello.
Pensaba que iba a morir de placer mientras esa adrenalina se excedía en caída libre. Intenté recorrer a oscuras, cada palmo de tu ferviente piel, mientras los gemidos marcaban la banda sonora del silencio, atrapados en una telaraña plagada de polvo de estrellas fugaces.


sábado, 23 de abril de 2016

Oculta para mí

Ella no es perfecta, quizás no está de moda, posiblemente no rompa corazones al pasar, pero yo… simplemente con mirarla, enfermo de amor.
No es una de esas típicas muñecas de porcelana, es calma, también tormenta, un planeta lejano capaz de eclipsarte.
Sé que por ella volví a nacer, que bajo su piel esconde los secretos de la felicidad, capaz de volar incluso debajo del mar.
El secreto de su belleza reside dentro, parte de su embarcadero llamado “corazón”… Y es capaz de florecer hacia el exterior, culminar una obra maestra con un beso por el cuál navegar sin perderse.
Diferente a las demás, oculta de la fama, irrealmente real, una obra de arte que va más allá, un perfume exquisito que te atrapa si te dejas llevar.
La amo sin miedo, con ganas, hasta el punto de derrochar sentimientos gratuitos por doquier. Y lo mejor es que el resto del mundo está tan sumamente ciego, que solamente yo la soy capaz de amar.


martes, 5 de abril de 2016

Cosas que hacer en días lluviosos




Sentarme a escribir plácidamente sobre cualquier aspecto de esta obra teatral que es la vida, mientras escucho el tintineo peculiar de la lluvia al rozar el pavimento.
Buscarte entre mis párrafos, ponerle acento a cada uno de tus salvajes besos, cobijarme sobre la firmeza que me proporciona tu pecho.
Contar historias sobre ti, en torno a ti; Leer y releer la pasión que escondes en tu magia.
Arrinconarme junto a la húmeda ventana, para escuchar el eco de tu voz segando el silencio, quebrando el horizonte sigilosamente.
Escuchar el latido de tu corazón traspasando la barrera del sonido.
Soñar despierto con leyendas que cuentan cómo se originó tu dulce mirada y de qué manera fue esculpida tal sonrisa en tu rostro.
Por cosas así, ojalá nunca cesara esta lluvia.